Un día en la vida de una kahira

Suena la alarma del celular, 7:30 am, es hora de despertar, dependiendo del clima hay enorme brillo tras la ventana o estará aún oscuro, de cualquier forma casi aún entre sueños, agradezco a mi Dios por un día más de vida. (Cada quien con sus creencias... las mías son ampliamente respetadas por mi Dueño). Cuando por algún motivo no despierte a esa hora he de comunicárselo a mi Señor, en el informe diario.

Me levanto desnuda y ataviada solamente con mi collar e inicia el día con "El ritual de la mañana".

Continúo preparando café para despertar del todo y comienzo a vestirme despacio y apropiadamente para ejercitarme, por ahora toca 1 hora de caminata diaria, a paso medio… dependiendo del capricho del Dueño o de mi comportamiento sé que usaré bragas de castigo o plug o nada debajo de la ropa. 
Mientras camino he de reflexionar tanto en las actividades del día como en mi evolución e integración respecto a la esclavitud de que soy objeto. Si surgen ideas nuevas de cualquier tipo, también he de comunicarlas a mi Señor.

Regreso a la mazmorra y me dirijo al cuarto de baño, ahí me desnudo y hago 30 flexiones como actualmente se me ha indicado, el número de repeticiones puede variar según mi Dueño quiera.

9:15 voy al servicio, continúo con "La limpieza de orificios" que es fundamental, como Su esclava siempre he de tener mis agujeros impecables para el uso de mi Amo y ha de ser obligatorio realizarla tras las comidas, 3 veces al día, donde mi coño, culo y boca serán higienizados a profundidad. Prosigo con "El ritual de baño". 

¡Qué delicia ahora llega la ducha, chorros de agua clara y fresca caen desde la regadera, utilizando jabones y shampoos naturales! He de tener mucho cuidado en estar perfectamente depilada por gusto de mi Señor, siempre he de estar limpita y presentable... la kahira sin duda es la carta de presentación del Amo. 
Habiéndome secado con una gran toalla felpuda, derramo gotas de cremas y aceites aromáticos en mis manos y froto mi cuerpo con ellas. Desnuda me coloco el triskel en el cuello, uno de los muchos regalos que mi Señor Tarha ha tenido a bien obsequiarme... o más bien, permitirme usar, porque finalmente TODO lo mío es de El, así que he de cuidarlos como los tesoros que son, "mi triskel", que es símbolo de mi esclavitud lo coloco ceremoniosamente y he de portarlo durante todo el día, así prosigo a realizar las 14 posturas de kahira que mi Amo y Señor me ha ordenado ejecutar y que he de sostenerlas exactamente los segundos que ha fijado para cada una.  

Me dirijo al armario y ya perfumada elijo entre la ropa clasificada como el arco-iris, me visto y calzo según mi gusto o la instrucción  de mi Amo, siempre teniendo en cuenta que me está prohibido usar tangas o bragas y pantalones, salvo su orden expresa.
Ya vestida, procedo a peinarme y arreglarme según lo indicado, si por ejemplo tengo una cita de trabajo él lo sabe con anterioridad y he de estar con la ropa que indica, incluídos accesorios, tipo de maquillaje, peinado y calzado. No puedo cortar o teñir el cabello sin permiso o conocimiento previo de mi Dueño.

Se llega la hora del desayuno, que ha de ser sano como corresponde. Luego toca beber agua y ahí aprovecho para hidratarme pues solamente 5 veces al día lo tengo permitido y a horas previamente determinadas.

Como buena esclava he de asear la mazmorra y arreglarla al gusto de mi Dueño, para su mayor satisfacción o facilidad cuando me de algunas órdenes. El suelo ha de estar impecable pues ahí podré desplazarme de la forma que indique o incluso besarlo o lamerlo si se le antoja.

Ya son las 10 de la mañana, la kahira se dispone a trabajar, ya sea saliendo a la calle o a través de Internet, ahora también puedo hacer llamadas telefónicas, pero nada de chatear. Ocasionalmente es la hora de los cursos de superación personal que mi Dueño me da el privilegio de asistir, dos o tres veces a la semana. Si voy a manejar el auto deberé pinzarme el coño mientras esté arriba de él y vaya sola....

11:00 am… ufff por fin puedo fumar y volver a tomar agua, que entre comidas no tengo permitido ni jugos ni mucho menos sólidos.

Entre 13:00 y 14:00 horas ya puedo acceder a un espacio de ocio, olvidándome de todo lo que no sea esparcimiento y diversión, ahora es que puedo leer, bailar, escuchar música, ver TV, pasear, simplemente sentarme a meditar o tomar el sol, también podré comunicarme casi con quien lo desee a través de Internet. Y digo “casi” porque por ejemplo: lunes, miércoles y viernes no puedo chatear con dominantes excepto con mi Dueño; martes, jueves y sábados tengo prohibido hablar con sumis@s y los domingos no puedo hablar con nadie que no sea El. En cuanto a las normas del MSN es que no puedo tutear a nadie ni iniciar la conversación, ni dar mayores datos de mi Señor ni míos que no sean la ubicación, he de presentarme como “kahira lilith propiedad de Tarha”.

A las 13:15 he de ir al servicio y a las 13:45 tomar agua. Llegan las 14:00 y vuelvo a tener actividades laborales sea en la mazmorra o en la calle, hasta las 15:30. A partir de esa hora tengo media hora para comer, un par de días por semana esa "hora" se alarga porque hay reuniones sociales.

En días “ordinarios” puedo volver a conectarme a MSN, pero como norma a partir de las 16:00 tendré conexión fija con mi Señor. De 16:15 en delante puedo estar en Internet con el objeto de ampliar mis estudios, desarrollar mi creatividad, planificar trabajo o realizarlo. Mientra tanto mis horarios continúan: 17:15 Ir al servicio, 17:30 fumar, 18.45 tomar agua, 20:45 tomar agua.

Antes de ser su propiedad, lilith hacía siesta (hedonista la niña), ahora solamente está permitida los sábados. Esos días también me ha concedido ver películas o más programas de TV, porque hasta los horarios televisivos entre semana están restringidos.

Son las 21 horas y ha llegado la hora de cenar y realizar tareas domésticas. Aunque sus instrucciones sean cenar a esa hora, de todas maneras he de avisarle y solicitar permiso para hacerlo. Por lo general me hace preguntas sobre el posible menú y entonces decide qué alimentos y líquidos he de tomar.

Durante este tiempo, esté o no trabajando, me toca: 21:15 Ida al servicio, 21:30 ritual de limpieza, 22:30 fumar, 22:45 tomar agua.

Obligatorio, pase lo que pase he de estar en comunicación con mi Dueño a las 23:00, desnuda y tan solo portando mi collar… obedeciendo sus órdenes, o simplemente charlando y escuchando música. En plena intimidad.

Mi cuarto y último tabaco del día es a las 00:30, mi último vaso de agua a las 00:45 y mi última ida al servicio a las 01:15 de la madrugada, siempre y cuando mi Señor no apetezca otra cosa. Hace un par de noches fui castigada sin fumar toooodo el sábado y fue consecuencia de haber movido las manos unos segundos mientras estaba en la posición "set", de verdad que después de muchos minutos de estar así se duermen partes del cuerpo, en fin....gajes del oficio.

Entre otras actividades, solamente puedo realizar 3 llamadas telefónicas sociales por día, a excepción de asuntos laborales que es ilimitado.

Los domingos tengo permitido asistir a reuniones religiosas, también con tiempo ilimitado. Si existe alguna tarea de introspección, será el tema y en el horario que El decida.

A reuniones de ocio imprevistas tengo un límite de asistencia de 3 al mes sin solicitar permiso, solamente dando aviso. En reuniones sociales o en viajes, donde hay tiempo para avisar, siempre he de solicitar su anuencia, y asumir sin reclamación alguna si lo concede o no. Jamás he de llegar después de medianoche a casa....como la Cenicienta (cinderella).

A excepción de alguna enfermedad o malestar, visitas o situaciones que están fuera de nuestro alcance, este horario ha de estar seguido al pie de la letra. Excepciones a la regla deben ser comunicadas y tengo claro que estoy expuesta a sufrir las consecuencias. Aunque mi Dueño es tan comprensivo, no deja que me desvíe ni un ápice...

Diariamente he de enviarle un informe de las comunicaciones que he tenido sea por sms, teléfono fijo o celular, MSN, FB, Hotmail y un resumen de las conversaciones mantenidas y de los blogs leidos, incluídos los nuestros. 
Si es su deseo también he de detallar por escrito algunas órdenes de índole sexual que ocasionalmente he de ejecutar cuando no estoy ante su presencia. Obviamente me está estrictamente prohibido mantener contacto sexual con nadie que no sea El y ni tocarme por mi propia iniciativa, porque mi cuerpo le pertenece por completo. 
La valija con mis objetos de sumisión ha de estar bien resguardada de la mirada de extraños y por supuesto la colección de juguetes bien limpiecita para cuando me ordene usar alguno.... o más a la vez.
No tengo horario para ir a dormir, me ordena retirarme cuando le viene en gana y es un privilegio el poder hacerlo. Estoy a entera disponibilidad de mi Amo las 24 horas de todos los días del año. Mi día de kahira termina cuando ordena que me retire y vaya a la cama o al suelo, desnuda con mi collar, alguna vez encadenada también.... y ya si sueño con El, uffff... es como la cereza del postre.
Caigo rendida y satisfecha, tanto si he sido recompensada como castigada y espero descansar con la esperanza y alegría de despertar otro día más como su propiedad.

Así es un día cotidiano de la kahira, un día sin fin, que parece regirse por un horario predeterminado por capricho de mi Dueño, pero que puede cambiar radicalmente según sus deseos.... a quien le parezca que es fácil… que tire la primera piedra, jiji. No creo ser la kahira perfecta, porque además que la perfección no existe seguramente sería muy aburrida. En ocasiones cometemos errores, no todo es miel sobre hojuelas, aunque afortunadamente la comunicación entre mi Dueño y esta humilde kahira siempre está basada en términos de avanzar juntos en este maravilloso camino de Dominación/sumisión.

Gracias Amo por dedicarme su tiempo, paciencia y cariño en el delicado proceso de convertirme en la kahira que desea tener a Su servicio... Porque además, esto solamente puede lograrse cuando la propiedad confía plenamente en la palabra y hechos del Dueño, solamente así la entrega de la vida y voluntad puede ser TOTAL.
A quien parezca que un día en la vida de la kahira es aburrido o tedioso contestaré que NO, en absoluto porque aún cuando un día a veces se parezca a otro, es como recorrer una espiral siempre ascendente donde mi posición como kahira me causa mucho placer y ocasiona también el beneplácito de mi Amo y Señor Tarha... y eso es lo más importante. 

En conclusión, mi objetivo trascendental es hacerle feliz y ser feliz de pertenecerle... y de eso también le estoy agradecida a mi Dios.

lilith {T}